Las Cartas a un joven poeta son un libro "distinto". Durante mﾃ｡s de veinte aﾃｱos tuvieron un ﾃｺnico lector. Publicadas por ﾃｩl en 1929, tres aﾃｱos despuﾃｩs de la muerte de Rilke, han sido leﾃｭdas y releﾃｭdas por centenares de miles de lectores a lo largo del siglo. Su tﾃｭtulo deberﾃｭa ser, quizﾃ｡, Cartas al aprendiz de hombre, porque tal es su tema: ﾂｿcﾃｳmo llegar a ser lo que estamos llamados a ser?, ﾂｿcﾃｳmo entrar en contacto con la inmensa energﾃｭa que habita en lo inconsciente?, ﾂｿcﾃｳmo transformar la conciencia de tal forma que se convierta en conciencia poﾃｩtica, creadora, capaz de captar la belleza y la grandeza de lo real? Porque "poeta" y "hombre" para Rilke son dos palabras que quieren y tienden a ser sinﾃｳnimas. Quizﾃ｡ el secreto de este libro fascinante sea, en realidad, su tono. Al leerlo, contagia aquella vibraciﾃｳn dulce, serena, ﾃｭntima, acogedora, abierta al Todo sin ansiedad ni preocupaciﾃｳn y hace sentir al lector su propia vibraciﾃｳn y realidad en medio de la fantasmagorﾃｭa masiva y quimﾃｩrica de la existencia asﾃｭ llamada normal. El lector encontrarﾃ｡ en estas cartas, escritas a lo hondo y ﾃｺnico de cada ser humano, una presencia, una compaﾃｱﾃｭa y una dulzura inolvidables. No se cansarﾃ｡ de leerlas y releerlas, especialmente en ciertos momentos de su vida. Porque en ellos, quizﾃ｡ cuando mﾃ｡s lo necesite, estas cartas y su autor le recordarﾃ｡n, le harﾃ｡n sentir, quiﾃｩn es, en realidad.
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